Ley de Accesibilidad en Apps y Entornos Digitales

¿Sabías que desde el 28 de junio de 2025 hay una ley europea que puede cambiar el destino de tu app, tu plataforma digital y, en definitiva, tu negocio? No exagero. Hablamos de la Ley Europea de Accesibilidad 2019/882, una norma que ya no es solo cosa del sector público. Si tienes una empresa que crea productos digitales, ofrece servicios online o desarrolla software, ahora te toca mover ficha. Y si eres de los que piensa “esto va solo de poner subtítulos en los vídeos”, sigue leyendo, porque la realidad es mucho más interesante (y desafiante).

En Dribba llevamos más de 12 años diseñando y desarrollando apps en Barcelona para empresas que quieren marcar la diferencia. Te aseguro que pocas cosas han supuesto un giro tan radical en la mentalidad de nuestros clientes como este tema. ¿Por qué? Porque la accesibilidad digital ya no es un “extra bonito”, es legalmente obligatoria y, ojo, puede ser la mejor oportunidad de crecer y destacar en tu sector. Vamos al lío: ¿qué implica, cómo te afecta y cómo puedes adelantarte (y no quedarte atrás)?

¿Qué es realmente la Ley de Accesibilidad Digital?

Lo básico: la nueva normativa europea dice que todos los servicios digitales —apps, webs, cajeros, software de escritorio y móvil, plataformas online— deben ser accesibles para todo el mundo, sin importar sus capacidades o limitaciones.

Pero, ¿qué significa que tu app o web sea accesible?

Muy fácil:

• Que cualquier persona pueda entender y navegar por tu plataforma, aunque no vea, no oiga, tenga dificultades para usar un ratón o necesite apoyos tecnológicos.

• Que todo se diseñe bajo los principios de accesibilidad universal. ¿Colores, tamaños de letra, estructura? Nada al azar.

• Que sea compatible con tecnologías de asistencia: lectores de pantalla, teclados especiales, comandos de voz y mucho más.

En el día a día, esto se traduce en eliminar barreras digitales. Y no hablamos solo de poner textos alternativos en las imágenes: va de hacer que todo el viaje del usuario sea sencillo y sin obstáculos, para todos. En Dribba, cada vez que explicamos esto a un cliente, vemos la típica cara de “¡ostras, esto va en serio!”. Sí, va en serio, y afecta a todo el proceso: desde el boceto inicial hasta el testeo final.

¿Quién tiene que ponerse las pilas con la accesibilidad digital?

Antes podías pensar que esto solo era cosa de ayuntamientos o grandes empresas. Ahora la historia ha cambiado: si vendes, desarrollas o gestionas cualquier servicio digital en la Unión Europea, la ley va contigo. Así de simple.

Hablamos de:

• Agencias de desarrollo de apps (¡hola, Dribba!),

• Plataformas SaaS y marketplaces,

• E-commerce, fintech, bancos,

• Empresas de transporte, turismo, educación online,

• Startups y scale-ups con ambición europea,

• Y, en general, cualquier empresa que tenga una app, una web o una plataforma donde el usuario interactúe.

Lo más importante es que esto afecta a todo el ecosistema digital: desarrolladores, diseñadores, responsables de producto, directores IT, marketing, atención al cliente… La accesibilidad ya no es un “departamento”, es un requisito global. Así que mejor empezar todos juntos desde el principio.

Los requisitos clave (traducido a lenguaje normal)

¿Qué pide la ley, en concreto? Aquí tienes el resumen más útil que vas a leer hoy:

• Perceptibilidad: que la información se vea, se oiga o se lea según las necesidades del usuario (textos alternativos, subtítulos, colores contrastados).

• Operabilidad: que tu plataforma funcione sin depender de un solo método (por ejemplo, que todo se pueda hacer solo con teclado, no solo con ratón).

• Comprensibilidad: nada de textos enrevesados ni menús imposibles. Todo claro y sencillo, la interfaz debe comportarse de manera lógica.

• Robustez: tu app tiene que aguantar el paso del tiempo y seguir siendo compatible con nuevas tecnologías y lectores de pantalla.

Además, esto no es cuestión de hacer un “checklist” al final y ya está: la accesibilidad es un proceso continuo, que debe estar presente en cada nueva versión, update o funcionalidad.

Desde la experiencia de Dribba, las empresas que lo integran desde el inicio ven cómo su producto mejora para todo el mundo, no solo para cumplir la ley. Y eso, a la larga, es una ventaja competitiva brutal.

Sanciones y consecuencias: lo que no quieres que te pase

Esto va en serio:

Según los últimos datos, ¡más del 57% de las webs en España todavía no cumplen con los criterios de accesibilidad! Y la Ley 11/2023 (que adapta la directiva europea en España) no se anda con rodeos: si no te adaptas, puedes enfrentarte a sanciones importantes, desde multas hasta quedar fuera de concursos públicos o perder reputación.

¿No cumplir?

• Te cierras la puerta a miles de potenciales clientes,

• Te juegas sanciones económicas que pueden hacer daño,

• Das una imagen de marca desactualizada o poco inclusiva,

• Y lo peor: puedes perder proyectos o contratos por no estar al día legalmente.

Lo mejor es que cumplir con la ley no solo te evita problemas, también te coloca en la mejor posición para crecer, innovar y llegar a más gente. En Dribba, lo vemos así: adaptar tu web, app o plataforma a la accesibilidad es una inversión estratégica, legal y ética. Y, sí, ¡marca la diferencia!

¿Cómo adaptarse a la ley y no morir en el intento?

Ahora que sabes lo que hay que hacer, ¿cómo lo pones en marcha sin volverte loco? Aquí va la receta de la casa Dribba, simple y efectiva:

1. Haz una auditoría de accesibilidad

Antes de mover un pixel, analiza cómo está tu producto digital. Herramientas automáticas + test con usuarios reales = visión 360º.

2. Forma y sensibiliza a tu equipo

Que nadie piense que esto es cosa de “los técnicos” o “los diseñadores”. Todos deben tener clara la importancia y los requisitos, desde producto a soporte.

3. Diseña pensando en todos

Sigue los estándares internacionales (WCAG, por ejemplo), pero no te olvides de escuchar a los usuarios. Lo que funciona sobre el papel, no siempre funciona en la vida real.

4. Programa y valida, una y otra vez

Etiqueta bien, piensa en la navegación por teclado, revisa los contrastes, prueba con lectores de pantalla… Y repite cada vez que actualices la app o añadas algo nuevo.

5. Mantén la accesibilidad viva

Cada update, cada feature, cada rediseño: revisa y actualiza la accesibilidad como parte natural del desarrollo.

¿El resultado? Productos digitales mejores, más inclusivos y con usuarios (¡todos los usuarios!) más satisfechos.

Por qué la accesibilidad digital es el secreto para crecer (y dormir tranquilo)

Cumplir con la ley está bien, pero lo realmente interesante es lo que ganas al hacerlo:

• Llegas a más público: piensa en usuarios con discapacidad, personas mayores, usuarios temporales con dificultades, etc. Son millones.

• Mejoras tu reputación: las empresas inclusivas destacan en licitaciones, concursos, medios y, sí, en la mente del consumidor.

• Ofreces mejor experiencia de usuario: apps y webs accesibles suelen ser más fáciles y rápidas para todos, lo que significa mayor uso y recomendación.

• Fomentas la innovación: buscar soluciones para todos los usuarios te hace pensar diferente y descubrir oportunidades técnicas y de diseño.

• Duermes tranquilo: sabes que cumples la ley, evitas sanciones y puedes demostrarlo ante quien sea.

En Dribba, decimos que la accesibilidad digital no solo es obligatoria, es una palanca brutal para destacar y fidelizar clientes.

Errores y mitos: lo que la mayoría aún no sabe (y tú sí)

Hay quien aún piensa…

• “Esto es solo para las webs de los ayuntamientos.” Error. La ley afecta a todo servicio digital con usuarios en la UE.

• “Adaptar es caro y complicado.” Falso. Si lo integras desde el inicio, el coste es mínimo y el beneficio, máximo.

• “Ya es usable, ya vale.” No basta con ser usable. Una app puede ser sencilla para muchos, pero inaccesible para una persona ciega si no lee bien con VoiceOver, por ejemplo.

• “Mis usuarios no lo necesitan.” Seguro que sí: 1 de cada 6 personas en Europa tiene algún tipo de discapacidad y la población envejece. Además, la accesibilidad ayuda a todos.

Lo que hacemos en Dribba es desmitificar el tema y acompañar a nuestros clientes para que sus productos digitales sean inclusivos y punteros, sin perder creatividad ni calidad.

Herramientas y recursos para no perderse

Para ponerlo fácil, aquí van algunos recursos que usamos a diario:

• WCAG: las normas top para apps y webs accesibles.

• WAI-ARIA: para interfaces adaptadas a tecnologías de apoyo.

• Herramientas de test: como Axe, Lighthouse o WAVE.

• Lectores de pantalla: VoiceOver (Apple), TalkBack (Android), NVDA, JAWS.

• Formaciones y guías: ONCE, W3C, webinars, y hasta días internacionales como el GAAD.

Aplicar estos recursos (y no dejar de aprender) es clave para mantener la accesibilidad en cualquier proyecto, grande o pequeño.

La conclusión: pon la accesibilidad en el centro de tu estrategia (y gana)

La Ley Europea de Accesibilidad ha venido para quedarse y transformar el mundo digital para siempre. Adaptarte no es solo cumplir con una normativa, es abrir la puerta a nuevos públicos, proyectos y oportunidades. Y sí, es una vía directa para posicionar tu empresa como referente en innovación, responsabilidad y visión de futuro.

Desde Dribba, lo tenemos claro: la accesibilidad digital no es el futuro, es el presente.

Si quieres una app, web o plataforma que cumpla la ley y llegue a todos los usuarios, cuenta con nosotros. Te ayudamos a convertir la accesibilidad en una ventaja real (y a dormir muy tranquilo por las noches).

¿Te animas a dar el salto? ¡La inclusión y la innovación van de la mano!